Beneficios
El sonido del cuenco y su vibración llega a todo tu cuerpo y más concretamente a tu cabeza. Produciendo una sensación de equilibrio y armonía perfecta para la meditación. Debido a esto los budistas lo han utilizado para la meditación durante los últimos 3000 años. Su efecto en el cuerpo y en la relajación es muy notable, por eso es muy común verlo ya en las salas de masajes y spas dónde no solo se hace sonar los cuencos, también se colocan encima de la piel para que las vibraciones pasen al cuerpo.
Una práctica diaria de meditación de unos 20 minutos puede tener muchos beneficios como por ejemplo:
- Equilibrar los 7 chakras
- Relajar la mente después de un día de trabajo o bien preparar tu cuerpo para una dura jornada.
- Reducción del estrés y la ansiedad.
- Se ha demostrado que la meditación puede ayudar al equilibrio de la presión arterial y mejorar el flujo sanguíneo.
- Ayuda a equilibrar las emociones y a reducir los momentos de ira o enfado.
Cuando meditas en el sonido de un cuenco cantor, tu cerebro activa las Ondas Alfa. Son las mismas ondas que se activan cuando estas a punto de dormir o cuando estás teniendo un día de vacaciones relajado y haciendo lo que te gusta. Poner tu cerebro en modo Alfa de forma periódica mejora tu estado de ánimo y tu equilibrio natural.
Cuando escuchas la frecuencia de los cuencos, tus ondas cerebrales realmente se sincronizan con el sonido del tazón y, al mismo tiempo, las notas producen un estado meditativo profundo. No solo esto, sino que las ondas sónicas de los cuencos tibetanos pueden abren tu mente, lo que te puede llevar al despertar espiritual.